Siguiendo con las leyendas Patagónicas acá les dejo otra para que disfruten:
Elal se enamoró de Teluj (el lucero del amanecer), hija del sol y de la luna. Su madrina convertida en cisne lo alza sobre el lomo y emprende el vuelo al Este, sobre el mar. Al llegar la noche, ya cansados, Elal arroja una flecha sobre el agua formando un grupo de Islas. (¿Malvinas?) donde descansan para proseguir viaje rumbo al sol.
Cuando llegaron, su madrina, que como ya sabemos era bruja, convertida en mosca, se ubica en la oreja de Elal para indicarle paso a paso lo que debía hacer.
Nuestro héroe le pide al Astro Rey el permiso para casarse con su hija y éste, no contento con el pretendiente, le impone una serie de pruebas en las que tendría que poner de manifiesto: ingenio, inteligencia y valentía. En caso de salir airoso en todas, le otorgaría el permiso.
La primera consistía en rescatar un anillo que estaba dentro de un huevo envenenado al fondo de una caverna custodiada por un guanaco que mataba con la mirada. Mientras la mosca distraía al animal posándose en sus ojos y orejas, Elal lo mata con un certero golpe de shome (boleadora de dos bolas), luego le quita la piel y cubierto con ella penetra en la caverna. Allí utiliza el arco y la flecha para romper el huevo que estalla desparramando veneno, pero Elal se despoja de la piel salpicada y recupera el anillo.
Teluj, hecha mujer, lo aguardaba en un palacio al fondo de un frondoso jardín. Cuando Elal pretendió avanzar, a cada paso el suelo se convertía en pantano. Camina hacia atrás, le dijo la mosca, y no arranques flores, pues se convertirán en víboras. Así lo hizo hasta llegar a la puerta del palacio de donde asomaron dos mujeres; una joven hermosa luciendo “kai eorrenk” ( quillango de color blanco) y la otra vieja, deforme y harapienta. En realidad la vieja no era otra que Teluj disfrazada por orden de su progenitor para despistar a Elal. Advertido por su madrina eligió la verdadera.
“Has acertado nuevamente” dijo contrariado el sol, pero tendrás que superar todas las pruebas que te dé, y le fue dando tantas para dilatar el tiempo, a la espera que el pretendiente desistiera de sus intenciones, que no le alcanzaría la vida para cumplirlas. “Escapa con ella, el padre no te dará jamás el consentimiento” le aconsejó la madrina. Y huyeron juntos para siempre. Pero Teluj, temerosa de la furia de su padre, cuando éste sale, se esconde.
Hola William, un cuento muy bonito amigo gracias
ResponderBorrarpor compartir tus relatos,son muy entretenidos.
Besitos que estes muy bien.
Preciosas leyendas patagónicas donde el ingenio, el sentido común y la inteligencia intentan demostrar al hombre que son cualidades que nunca deben faltar.
ResponderBorrarMe ha encantado este post y el anterior. Las leyendas y los mitos, a pesar de su antigüedad nos enseñan con verdadera destreza los valores más actuales.
Un abrazo, William
Ay, pero que bonito, no si es una leyenda o un cuento, pero me encantó, y me parece genial que se hayan escapado juntos para vivir su vida y su amor, ¡que manías de los padres siempre buscando dioses para sus hijas! Gracias por estas historias tan bellas y fantásticas….
ResponderBorrarMuchos besitos.
Siempre nos pones algo bonito (fotos, historias, leyendas). Ya estoy esperando el siguiente post.
ResponderBorrarBesos
Gladys: gracias a vos por pasar y dejar tu comentario. Besos!
ResponderBorrarMarisa: La otra cualidad que me gustó de esta leyenda fue que escuchó consejos. Sin su madrina no hubiese llegado muy lejos. A veces hay que saber dejar de lado el orgullo y trabajar en equipo y estimar la sabiduría e inteligencia del otro.
ResponderBorrarAbrazo!
Campoazul: es una leyenda patagónica. Me alegra que te haya gustado.
ResponderBorrarBesos!
Maria: gracias por pasar y dejar tu comentario. En breve estare subiendo un nuevo post.
ResponderBorrarBeso!
Hermosa leyenda. Los padres celosos han existido siempre, hasta en las historias de cuentos.
ResponderBorrarsaludos.
mariarosa
Sobre el hombro
ResponderBorrarllevo un pesado equipaje
tejido con los hilos de la fantasía
del color de las estrellas
que me han ido hipnotizado
su interior esta vestido
con el glamour
de las sedas carmesí
bordadas con las plumas
de la libertad del pensamiento
hoy me acerco
y en silencio te invito
a que te saluden
los trémulos lirios
de las altas colinas
ellos en mi nombre
y en el suyo propio
te felicitarán
el presente fin de semana
entre calurosos aplausos
y las densas pestañas
que con sublime
candor te miman,
se sentirán desvalidas
al recibir el suspiro del viento
como despedida.
María del Carmen
Hola amigo William paso a saludarte y a darte las gracias por estar en mi pequeño mundo tus
ResponderBorrarpalabras alimentan mi alma,gracias amigo.
Un abrazo grande que tengas un bello fin de semana.
Wiliam :) Bonita leyenda! De dónde las sacas? Besos. MissVainilla
ResponderBorrarMariarosa: gracias por tu comentario (muy acertado por cierto).
ResponderBorrarSaludos!
La gata coqueta: gracias por siempre deleitarme con tus versos. Un gusto tenerte por aquí.
ResponderBorrarGladys: es un gusto estar en tu pequeño mundo. Gracias por tus tiernas palabras.
ResponderBorrarUn gran abrazo!
Miss Vainilla: Estas leyendas las he leído en la primaria. Gracias por pasarte.
ResponderBorrarBesos!